
En los últimos años, los portátiles se han hecho más pequeños, delgados y ligeros, pero sobre todo más potentes. A pesar de estas numerosas ventajas, a menudo sólo disponen de un número limitado de puertos. Para sacar el máximo partido a su portátil y no tener que preocuparse por no poder conectar accesorios adicionales, merece la pena equiparse con una estación de acoplamiento. Gracias a este dispositivo, la funcionalidad del ordenador mejora notablemente y aumenta la comodidad del usuario.